Bueno, hemos llegado a la última entrega de los PPTs del curso de Clásicos AM. En esta, las presentaciones llamadas Días de Flores: Música Libre y La Canción de Protesta.

Música Libre

Hemos hecho ya mención del movimiento yéyé en Francia a fines de los años sesenta, explicando que:

“El movimiento yéyé, de la segunda mitad de los sesentas en Francia, es considerado como un giro importante en la historia de la música popular francesa (Lemancel 2008), similar al que ocurrió en latinoamérica con la “Jovem Guarda” y la “Nueva Ola” (Party 2006a) (…) Más que hablar de “los” yéyés, hay que hablar de “las” yéyés. Capitaneadas por Brigitte Bardot, Dalida y Françoise Hardy, las chicas yéyé harán una música escapista, festiva y sexuada que contrastará tanto con los mensajes de los autores-compositoresintérpretes, como con las nostalgias más anticuadas (y viejas) de las estrellas del inicio de la quinta república. Inspiradas en las “girly groups” norteamericanas (The Shangri-Las, The Ronettes) y lanzadas por el programa radial “Salut les copains” y la línea “editorial” de la ORTF (Office de Radiodiffusion-Télévision Française)”.

Nos concentraremos, en esta presentación, en el impacto del yéyé en latinoamérica, con especial énfasis en Chile, a inicios de la década de los setentas.

La Canción de Protesta

Puede resultar curioso iniciar un apartado referido a la canción de protesta con una cita de un prohombre del punk, máxime cuando este estilo separó aguas y fue fuente de luchas en el Chile de los ochentas entre los “lanas” y los “punketas” de la época. Cómo no recordar las letras del más importante grupo de inspiración punk en Chile, Los Prisioneros, cuando gritaban:

“Me aburrió tu postura intelectual / Eres una mala copia de un gringo hippie. / Tu guitarra ¡oye, imbécil barbón! / Se vendió al aplauso de los cursis conscientes. / Contradices toda tu protesta famosa / Con tus armonías rebuscadas y hermosas. / Eres un artista, y no un guerrillero, / Pretendes pelear… / Y solo eres un mierda buena onda”.

Puede resultar curioso, pero, no es tan curioso. En el Chile de los ochentas, los intérpretes del Canto Nuevo y Los Prisioneros, se encontraban en posturas políticas (o mejor, sociales) muy parecidas. En el ámbito estrictamente musical, en cambio, tomaron veredas opuestas: mientras que el Canto Nuevo hallaba sus raíces melódicas en la Nueva Canción Chilena, en la música folklórica latinoamericana, y sus raíces letrísticas principalmente en Violeta Parra, Víctor Jara, Pablo Neruda y, hasta cierto punto, en los trovadores contemporáneos franceses; Los Prisioneros eran herederos directos del punk y el post-punk británico de la segunda mitad de los setentas. El triunfo y la pervivencia de Los Prisioneros por sobre el Canto Nuevo (Neustadt 2004), se puede explicar, curiosamente también, y en parte, por su asunción sin vergüenza de la influencia en su música de los Clásicos AM.

Acá están las descargas:

CLÁSICOS AM – MÚSICA LIBRE

CLÁSICOS AM – LA CANCIÓN DE PROTESTA