Hoy domingo es el reconocimiento de salas y probablemente muchos de los que rendirán por primera vez la PSU mañana y pasado están nerviosos y ansiosos… y con justa razón. No es mi intención el generarles una paz interior forzada, pero si darles algunos datos sobre el cómo la actitud con la que se enfrentan las pruebas influye en el rendimiento. El consejo número uno, y el más importante de todos ya lo dió Martínez ayer (lee la parte 1!):

La razón es simple: si bien es importante mantener el estado de alerta (para no bloquearse y evitar que te de sueño, no pajarear, etc.) es esencial que el estado de alerta no se transforme en miedo. El miedo (valga la obviedad y la redundancia) es una emoción que evolucionó en los organismos con SNC como respuesta a una amenaza, y es un mecanismo en gran medida automático, y que “redistribuye” los recursos cognitivos y corporales para la defensa o la huida. La PSU no es tu enemigo, y conceptualizarla como una batalla a muerte o una competencia puede jugar en tu contra.

Respira hondo y pausado, cierra los ojos y simplemente olvídate del futuro. La única forma eficiente de completar una gran tarea es dividiéndola en sub-tareas, con metas específicas, y la PSU es solo un paso más así que -por lo menos durante los días que vienen- olvídate de las postulaciones, las carreras, las Universidades, las becas, etc. Toma un buen desayuno (liviano, pero variado), evita intoxicarte con café (definitivamente NO QUIERES que te den ganas de hacer pipí durante la prueba, lo digo por experiencia, LOL) y sobretodo, duerme bien esta noche. Haz ejercicio físico, toma leche tibia o un tecito, etc… no te quedes hasta tarde!

Otro error común es entrar en modo berserk la última noche y ponerse a repasar a última hora. WRONG! Los recuerdos necesitan de tiempo para consolidarse, y la tasa de retención es muy baja cuando se estudia a última hora… si lo deseas, haz un ensayo breve (unas 15 preguntas) de cada prueba, pero NO LO CORRIJAS… tómalo como un precalentamiento, no como una medición de tu capacidad. No trates de sobreprepararte. Lo importante es que tomes conciencia que estás familiarizado con los distintos tipos de preguntas: esta familiaridad se traduce en confianza, y la confianza en tranquilidad. Ve una película, juega tetris, etc… ah, y evita meterte a Facebook y Twitter: seguramente el pánico está cundiendo entre los n00bs, y en situaciones así los grupos suelen echarse pa abajo en vez de darse confianza unos a otros. Tienden a ver la prueba como la más importante de la vida, y no es así. E incluso si lo fuera, rendir la prueba con ese peso sobre la espalda es una mala estrategia.

Lleva un reloj silencioso (no de esos que hacen *bip* cada cierto tiempo), y deja el celular en casa. Y si es indispensable que lo lleves, apágalo, no lo uses como reloj. Tienes que distribuir el tiempo adecuadamente: calcula cuantos minutos tienes por respuesta, y si te quedas mas tiempo de los minutos planificados, pasa a otra pregunta y deja el pendiente para el final. En el caso de que te quede tiempo, úsalo para chequear las respuestas: haber resuelto un problema bien y haberse equivocado en llenar el círculo es uno de esos errores que no quieres cometer.

Una de las cosas con las que nos metían miedo una y otra vez cuando estaba en el Liceo, era que es preferible omitir a responder mal, porque las respuestas equivocadas restan puntaje. El resultado era que algunos compañeros omitían casi la mitad, por pura inseguridad. Omite sólo en caso de que tu instinto te diga que algo salió mal. Es importante mantener el balance entre dos extremos indeseables: dejar sin responder preguntas que podrías haber acertado, o responder mal preguntas que deberías haber omitido. Esto no es como el póker, bluffear no es una opción… pero tampoco abandones la mesa a la primera ronda. En lo único que se parecen el póker y la PSU es que hay que rendirla con confianza, no con miedo.

Estuve revisando la literatura científica al respecto y hay una enorme cantidad de estudios sobre la ansiedad y el desempeño en pruebas evaluativas (busqué “test anxiety” en sciencedirect.com y pillé 3765 artículos!) y revisando por encimita, el consenso es que la ansiedad interfiere con la concentración y degrada el desempeño. Así que ya saben: nada de desearse suerte, a desearse ánimo y valor, y nada de distraerse. Lo que sigue de ahora en más serán los mejores años de tu vida. Te lo firmo ^_^

Les dedico esta canción, especialmente a mi hermano chico