[Ricardo] Esta mañana mi señora me despertó sorpresivamente más temprano que lo que acostumbro. Me dijo: “te tengo un regalo, escribí un artículo para Tercera Cultura, sobre el secreto de la saga Crepúsculo” [que ha estado leyendo obsesivamente desde hace una semana]. Acá se los dejo.
Edward Cullen: estamos todas locas
por María de los Ángeles Calleja (37 años, madre de dos hijos, diseñadora y profesora universitaria)
El viernes pasado salí de mi casa a dejar a mi hija al colegio, con el tiempo justo (¡por supuesto!) -lo que me pone de un humor pésimo-, sumado a que sólo había dormido tres horas esa noche y no muchas más durante todos los restantes días de esa semana. En la rotonda de Lo Curro un Volvo gris me hizo una encerrona; y en vez de enfurecerme y levantar los brazos para que viera que estaba indignada, cerré los ojos y sonreí para mis adentros. Raro. Llegué al colegio todavía sonriendo, y a la salida me encontré con otra apoderada del curso que me preguntó por qué la cara de cansancio. Casi con vergüenza reconocí que esa semana había trasnochado porque me había quedado leyendo. Y, obvio, ella me preguntó qué estaba leyendo (la ilusa debe haber pensado que eran informes de pega o algo así). ¡Ja! Miré al suelo y le dije evasivamente: “un libro que me tiene un poquito obsesionada… pero es un libro adolescente que en realidad no requiere mucho esfuerzo intelectual, pero no sé… no he podido dejar de leerlo y en cuatro días he leído tres y medio volúmenes de esta saga”. Esperaba que esta explicación la dejara tranquila para que no me preguntara más. Entonces grito: “¿¡qué estás leyendo!?”. ¡¡¡Uf!!!: ”¡¡¡CREPUSCULO!!!”. Contesté sin mirarla a la cara. ”¡¡¡Ajá!!!”. Y en ese momento abrió su cartera y sacó “AMANECER” el cuarto libro de la saga. ¡¡¡Qué maravilla, éramos cómplices!!! Ella entendía mi adicción, así que pertenecíamos al mismo club de mujeres locas y obsesivas que amábamos irremediablemente a Edward Cullen, el protagonista de estas vampirescas novelas, que maneja un Volvo gris. Ese día llegué a mi pega y con menos vergüenza les comenté a algunas mujeres, con diferentes edades e intereses, este asunto y resultó que el club de locas y obsesivas se había ampliado enormemente, siendo el único requisito para pertenecer a él ser mujer. Porque parece que Edward Cullen es irresistible a todas. Las que aún no lo han leído no lo entienden se ríen y ponen cara de “pobre loca”… o peor… “pobre tonta”. Pero no tienen idea de lo que es esta droga hasta que no conocen al hombre, o en este caso SER, por el que estarían dispuestas a ponerle el gorro a sus maridos, abandonar a sus hijos y prácticamente convertirlo en el centro del universo personal; por lo menos durante el tiempo en que leen los libros.
Ahora, pensando más fríamente en este personaje inolvidable, me doy cuenta de que es absolutamente inexistente. porque su creadora es una mujer, obvio. Un personaje así no cabe en una mente masculina, sólo puede ser el resultado de la acuciosa investigación de otra loca que hizo a este Frankenstein con las partes que más nos gustan del príncipe azul que imaginábamos de adolescentes y que creíamos olvidado y sepultado bajo la racionalidad, la rutina y el pragmatismo. Este príncipe azul está encarnado en un ultramaravilloso vampiro: peligroso pero minísimo al extremo, con corazón frágil y con una fuerza de otro planeta, misterioso, pero rendido al amor, capaz de sacrificarse por su amada, respetuoso al extremo, pero contenido –ya que también siente la irrefrenable atracción sexual por ella. Además, como guinda de la torta, el tipo se viste con ropa de diseñador y maneja unos súper autos, tiene recursos ilimitados y parece no estar consciente de ellos. Uffff!!! ¿Qué más se podría pedir? ¡¡Ah!!, como si fuera poco, su perfección es tal que tiene un pequeño defecto que podría hacer parecer frikie a veces: es ultraposesivo, cosa que a las que nos sentimos defraudadas y suspicaces con la revolución femenina, no nos molesta.
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Para más detalles sobre la obsesión femenina (de todas las edades desde los 12 hasta los 92 años) por esta saga, les recomendamos leer: My Vampire Boyfriend: Postfeminism, “Perfect” Masculinity, and the Contemporary Appeal of Paranormal Romance (Mukherjea, 2011), publicado en Studies of Popular Culture, y donde se explora sobre las significaciones postfeministas de este fenómeno.
9 comments
Pamela Rojas says:
Dic 4, 2011
La verdad, yo mujer, debo reconocer que es una saga que te deja enganchada por la fácil lectura (es como ver una película… de hecho, hasta puedes babear mientras lees) pero, personalmente me cargó. Las narraciones de acción son pobres, bueno, en si toda la narración es pobre, salvo cuando se trata de describir lo fantabuloso que es Cullen. Pero es una mierda de vampiro. No le llega ni a los talones a Lestat, con él hombres y mujeres pueden sentir atracción…
Nati says:
Dic 4, 2011
Lea a Anne Rice, mija. Esos son vampiros.
Si busca encontrar un tipo así en novelitas, mejor lea unas Corín Tellado.
Antonia Alvarado says:
Dic 4, 2011
Debo reconocerlo. A los 14 años, leí la saga de Crepúsculo como endemoniada y no podía amarla más. Pero llegó el último libro, y al darme cuenta que era una ridiculez con patas -una vez terminado, claro- dejé las novelas de lado para siempre y comencé a detestarlas.
Así que no estoy de acuerdo con que el único requisito sea ser mujer…. conozco muchas mujeres que no pudieron digerir el libro y yo, en mi opinión personal, encontraba más atractivo a Jasper (sí, nunca he sido fan de los personajes principales) que a Edward (a quién encontraba una copia barata de Mr. Darcy de Orgullo y Prejuicio).
Si quieren encontrar vampiros realmente atractivos, en libros más light que las sagas de Anne Rice como dice Pamela, deben ver -o leer- True Blood, para conocer a Eric o Bill. Esos son verdaderos vampiros (aun que Drácula o Lestat siempre les ganarán), y esos si son sexies. Además, traen con ellos toda una lista de defectos que los hacen más realistas.
Sin embargo, encuentro muy bueno el artículo. Lo que dice María de los Ángeles es verdad, si alguien alguna vez se sintió atraída por la saga de Crepúsculo (sea cual sea la edad) fue por esas razones.
Niña says:
Dic 4, 2011
Definitvamente debo concluir que las mujeres tenemos el don especial de hacer un texto cautivante, se cuente lo que se cuente en él, o por muy ridículo que parezca. No he leído la saga de Crepúsculo (por razones obvias… pero creo que si cae en mis manos difícilmente la soltaré), pero me impresiona la frecuencia con que los libros escritos por manos femeninas son capaces de despertar emociones en sus lectores… Y no sólo por Anne Rice o Corin Tellado, sino también por María de los Ángeles que aquí escribe. 🙂 No sé si esto se debe a la expresividad natural o don algo artístico del género femenino que hace esto posible. Me gustaría que Remis o Ricardo pudieran aclararme esta duda en lo posible. Y muchas gracias por este blog. Llevo siguiendo sus post y podcast desde sus inicios, y merecen mis más sinceras felicitaciones por entregar cultura, formas de pensamiento y humor a los chilenos dispuestos a escucharlos. (PD: Como sugerencia, ¿no han pensado en LiveStream para hacer un podcast alguna vez? #eso)
trece says:
Dic 4, 2011
Vamos! no hay ningun secreto, siguesiendo el estereotipo mas facil para ahcer caer mujeres: el chico rudo inmaduro emocional. El que te claienta, pero luego te arrepientes…
No les parece ridiculo que un vampiro con la experiencia de vida de cientos de años, se comporte y tenga las emociones d eun niño de 15? y que le pida amor eterno a una niña que no ha vivido mas de 17 años…
Rodrigo Ramírez C says:
Dic 5, 2011
yo creo que hay que entender este hombre ideal (que pelea por ti, te conquista, etc.) retratado por la escritora como consecuencia de sus creencias religiosas (ella es mormona), y más que eso no hay mucho que decir, sabido es lo machistas que son los mormones.
Karin says:
Dic 10, 2011
Llegué por primera vez a tercera columna siguiendo el artículo sobre la investigación de los Nobel de física….y me encontré con esto. Fabuloso, pensé que yo era la única de mi generación que había caído inexplicablemente atrapada por la saga Crepúsculo ( 28 y madre de tres, osea; grandecita para este tipo de novelas). No he leído los libros, la verdad es que me he resistido. Pero me volví adicta a las películas de la saga….algo tienen, sin duda. Y espero ansiosa la última película. Claro que no iré a hacer el ridículo al estreno en el cine, compartiendo fila con cientos de niñitas gritonas….Ahí si que no. Reconozco mi atracción por Crepúsculo, pero mantengo mi dignidad.
Paulina says:
Dic 19, 2011
Primero que todo, me parece una rotunda tontera comparar a Edward Cullen con Lestat. Si ambos son vampiros, pero por favooor, atengámonos a la situación en la que se nos presenta cada uno. Leí “Entrevista con el Vampiro” (y posteriormente “Lestat”) a los 15 años, vi la película y obvio que caí rendida a los pies de la interpretación de Tom Cruise del vampiro elegante, despiadado y sin respeto por la vida humana. Totalmente opuesto a lo que nos presenta la saga de Crepúsculo. Admito que cuando apareció la película me negué rotundamente a ir a verla, no podía concebir el hecho de que un vampiro enamorado de una humana fuera el protagonista, no después de tener en la mente lo que me dejó Anne Rice en sus libros. Pero si le di una oportunidad a los libros… y me obsesioné. 1 semana demoré en leerme lo 4 tomos y quedar con ganas de más. ¿Por qué? porque al final da lo mismo que el hombre sea vampiro, Edward representa el idealismo del hombre sensible, protector y dispuesto a dar la vida por una. Y si no te gusta ese tipo, está el hombre lobo, que es más “macho rudo”, testarudo, y apasionado.
A si que… encuentro que no va al caso comparar vampiros… si al final, TODOS son producto de la imaginación del ser humano. Disfrutemos mejor y sigamos muriendo de amor por ese vampiro inexistente que JAMÁS llegará a mi vida :C jaja
cata says:
Jul 24, 2012
Perdon pero Edward Cullen es demasiado lindo y guapo caballero y romantico y es hermoso hermoso lo amo y sus peliculas son geniales lounico que no me gusta es que en amanecer parte2 va a aparecer su hija y la odio es una idiota pero el es divino y mejor que cualquiera