(fuente: XKCD-es)
Nos adelantamos una semana a segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Chile: segundo episodio de la segunda temporada de Tercera Cultura, nuestro podcast !!!
En este episodio, titulado “No Vote por Mí”, invitamos a Víctor Herrero (periodista, Master en Asuntos Internacionales de la Universidad de Columbia) para hablar de política y elecciones.
La complejización del eje izquierda/derecha, la Concertación como la Coca-Cola, Sistemas Multiagente, el Modelo de la Cultura de Axelrod y la “nueva clase media”… Todo al ritmo de Arturo Frei Bolívar y Sex Pistols.
Puedes escuchar este nuevo episodio en podcaster.cl…
http://www.podcaster.cl/2010/01/tercera-cultura-12/
Puedes dejar ahí tus comentarios o preguntas, o aquí mismo… si te gustó el episodio, únete al evento de Facebook e invita a tus amigos a asistir!
Y como lo prometimos en el episodio, aquí van los links:
Axelrod, R. (1997). The dissemination of culture: A model with local convergence and global polarization. J. Confict Resolut. 41, 203–226. Un resumen del modelo aquí
Una aplicación en línea del modelo se encuentra en este vínculo.
Cómo funciona:
1) En la tabla Java seleccione Colours. Esto hará que la cuadrícula se divida en cuadraditos de colores.
2) En L ponga el valor 32 (con los botones +, -).
3) En F ponga el valor 2 (con los botones +, -).
4) En q ponga el valor 2 (con los botones +, -).
5) Presione el botón random.
En estos momentos la cuadrícula se debería ver así:
Cada cuadradito representa un agente, el color del cuadradito muestra un “perfil”. ¿Qué es un perfil? Un perfil es un valor del agente de acuerdo con dos rasgos (un rasgo puede ser, por ejemplo el gusto por la música o el deporte), y dos opciones por cada rasgo (por ejemplo, en música, se podrían tomar valores como el reggaeton o el jazz; y en deporte, los valores de tenis o fútbol). Como en el ejemplo hay dos rasgos y dos opciones por cada rasgo, hay cuatro posibles perfiles (reggaeton, tenis / reggaeton, fútbol / jazz, tenis / jazz, fútbol), por eso, hay cuatro colores en el mapa. Si se nota, los agentes (cuadraditos) están distribuidos en la cuadrícula de manera aleatoria.
6) Presione el botón Stop/Go.
De este modo se inicia el juego. En cada turno se selecciona al azar un agente (cuadradito), y al azar uno de sus vecinos. Luego se comparan los valores de opciones y, si los agentes son similares, el agente elegido inicialmente “copia” una opción del otro. Esto se llama “diseminación de la cultura”. Luego de varios turnos, se verá que el juego se detiene y solo quedan dos colores (perfiles) agrupados en dos bloques claros. Lo que ha ocurrido es una polarización del sistema, tal como se ve a continuación:
Resulta muy interesante probar con otros valores de rasgos (valor F) y opciones (valor q).
La hipótesis que sostuvimos en el programa es que, en las elecciones como la del Plebiscito de 1988, los agentes (votantes) solo tenían un par de rasgos y opciones, y, en consecuencia, se producía una polarización. Y, en segundo lugar, que la elección presidencial actual (2010) tiene perfiles mucho más diversos.
Encuesta CEP de octubre 2009.
El análisis CEP poseleccionario.
La próxima semana vamos con un episodio dedicado a la astronomía, contacto con civilizaciones extraterrestres y demases… Saludos, y gracias por escuchar!
P.D: si hubiéramos sabido del bombazo que iba a dejar caer Patricio Navia al anunciar hoy su adhesión a la candidatura de Sebastián Piñera, después de haber apoyado a MEO… parece que el escenario electoral está MUCHO más complejo de lo que suponíamos!
3 comments
Guillermo says:
Ene 5, 2010
Patricio Navia hizo, creo yo, un cálculo racional. Si apoya a Piñera y Piñera gana (probabilidad alta) tiene posibilidades de insertarse en el núcleo de poder como representante del ala izquierdista del gobierno de Piñera (algo que el futuro presidente decididamente potenciará). Si Piñera pierde (probabilidad baja), pues nada, seguirá igual que ahora.
Guillermo says:
Ene 5, 2010
Lo que sí me parece insólito es que quieran aprobar el voto voluntario. Esa idea es muy mala, a mi entender, por una razón muy sencilla. El voto de un individuo no genera prácticamente ninguna diferencia en la suma total de la elección; luego, el beneficio que alguien puede obtener al votar es bajísimo. Por otro lado, ir a votar supone un sacrificio no menor de tiempo y costos de desplazamiento. Esto quiere decir que cualquier persona tiene fuertes incentivos para no votar y bajísimos incentivos individualistas para votar. En consecuencia, desde el punto de vista de la elección racional de un individuo que vela por sus propios intereses, la solución correcta es no ir a votar (salvo situaciones excepcionales).
Lo paradójico es que, desde el punto de vista del interés común, es muy importante para una democracia que la mayor parte de la gente vaya a votar.
Este conflicto se resuelve normalmente castigando económicamente al que no va a votar. Un principio que también se aplica en otros casos semejantes, como el pago de impuestos. La idea es que el costo económico de no ir a votar debe ser mayor que el costo económico de ir a votar, de modo de incentivar el voto, que es un bien para la sociedad.
Otra alternativa sería pagarle a cada votante. Nótese que incluso esta alternativa freak es más equitativa que la del voto voluntario, pues en este último caso los que colaboran con el bien público deben además pagar los costos asociados a ir a votar mientras que los que no se preocupan por el bien público no pagan nada y se benefician de las bondades de una democracia (por ejemplo, no temen que alguien de la policiía secreta les toque la puerta de la casa a las 2.00 de la mañana).
Una tercera alternativa sería que los que no quieren votar debieran ir el día de la votación a algún lugar alejado de sus casas a plantear que no votarán en la elección. El desplazamiento y el tiempo que esto tome no deberían ser menores que los de los votantes.
Algunos han objetado la legitimidad que tiene el estado para imponer multas en estos casos. Sin embargo, si la conducta del estado no es legítima en este caso, tampoco debería serlo en el caso de los impuestos, lo que es inaceptable.
En conclusión, creo que el voto voluntario es una de las peores ideas que se han propuesto para la democracia. El único argumento que he encontrado a su favor es que forzaría a los partidos a proponerles cosas interesantes (¿entretenidas?) a los votantes para que estos fueran a votar. No se explica, sin embargo, por qué eso podría ocurrir.
R_Campbell says:
Abr 17, 2011
Sobre un esquema no unidimensional de los partidos políticos chilenos, Oscar Landerretche creó uno muy interesante y útil en el 2006… aca un link: http://memoriaalterna.blogspot.com/2011/01/mapas-politicos-y-ud-donde-esta-parado.html
saludos