Una de las tantas escenas memorables de Cuando Harry Conoció a Sally es aquella en que están jugando a las Películas, y Meg Ryan se esfuerza por convencer a sus amigos de que está dibujando “Baby Talk” sin éxito. Quienes hayan jugado a ese juego, o al PictionaryTM, en el que se inspira, convendrán con nosotros que una de sus mayores dificultades es transmitir de manera sencilla y eficiente qué es lo que tenemos que decir (y las consecuentes agarradas de las mechas con el compañero o la polola de turno, –suspiro).
Un paper en prensa de la revista Cognitive Systems Research (How groups develop a specialized domain vocabulary: A cognitive multi-agent model, Reitter & Lebiere, 2010) parece resolver el problema, y al mismo tiempo nos enseña un poco cómo evolucionan los sistemas ideográficos de escritura. El artículo nos remonta a uno de la Cogntive Science de Garrod et al (2007) que propone un test que denominan The Pictionary Experiment. En él hay dos participantes, un Director y un Matcher, el Director dibuja para comunicar una palabra (que se selecciona de una lista de dieciséis), y el Matcher debe descubrir cuál es esa palabra. Como en todo este tipo de juegos, no se puede hablar y no se pueden usar palabras escritas. La mayor dificultad asociada es que el conjunto de palabras tiene conceptos o personajes que son muy parecidos unos a otros, como “teatro”, “galería de arte” y “museo”, tal y como se observa en el siguiente esquema:
En el modelo original de Garrod, hay tres variantes del juego, con Director y Matcher, pero sin retroalimentación (el Matcher no puede hacer nada), con Director y Matcher y Retroalimentación dibujada (por ejemplo, cuando el Matcher cree haber reconocido el dibujo puede poner un ticket) y la misma con alternación de roles. Los autores proponen que en los últimos dos casos, y en particular en el último último, luego de varias vueltas, las imágenes pasarán de icónicas a sígnicas (siguiendo el modelo del signo de Peirce), del mismo modo que ha ocurrido con el chino escrito.
Los resultados son bien impresionantes. Veamos, por ejemplo, los dibujos para “galería de arte” sin feedback y con feedback:
Observen qué pasa con “computador” en el modelo con feedack y con cambio de roles (tomado de Scott-Phillips & Kirby, 2010, Language evolution in the laboratory)
Una vez que un lenguaje de algún tipo se ha establecido, este debe ser aprendido de nuevo por cada generación. Esta transmisión cultural vertical es un ejemplo de iteración de aprendizaje, en el que el comportamiento de un individuo es el producto de la observación de comportamiento similar en otra persona que ha adquirido el comportamiento de la misma manera (Scott-Phillips & Kirby, 2010:414).
O sea, en el ensayo y error, en la repetición, la simplificación y la retroalimentación está la clave. Así que cuando juegue al Pictionary con su pareja, esté atento sobretodo a los juegos anteriores de la misma velada o incluso previas, de a poco irán armando una clave para comunicarse con facilidad y a veces casi con sólo poner el lápiz en el papel sabrán de qué están hablando.
Aproveche de ver más sobre el tema en el Foro de XKCD.
2 comments
guillermo says:
Nov 15, 2010
MARAVILLOSO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
guillermo says:
Nov 15, 2010
Ojo que, por lo que explican, el experimento habla sobre la evolución del lenguaje, no meramente de la escritura… de la motivación icónica al signo convencional… A veces uno tiene la impresión de que el mundo es perfecto 🙂